jueves, 23 de abril de 2009

SAN JORGE - ΑΓΙΟΣ ΓΕΩΡΓΙΟΣ


23 de abril: día de San Jorge, santo patrón de Grecia, de Inglaterra, de Cataluña, de Aragón, de Portugal, de Etiopía, de Georgia... y de ciudades como Moscú, Cáceres, Beirut o la mía propia: Alcoi. No deja de ser sorprendente el hecho de que, sin que su existe
ncia haya podido ser demostrada, posiblemente sea San Jorge el santo más venerado tanto en el Cristianismo oriental como en el occidental e incluso -en un fenómeno de sincretismo- en el mundo musulmán y en ciertas religiones afro brasileñas.



Los orígenes

Es posible que la figura de San Jorge viniese a sustituir a alguna antigua divinidad griega. Su nombre, indiscutiblemente de origen griego, deriva de γεωργός, que significa agricultor o labrador. Término a su vez derivado de Gea, la tierra, la engendradora, y ergon, que designa el trabajo en general y muy especialmente el trabajo de la tierra. La palabra semítica gir tiene el mismo sentido agrícola que en griego. Contiene, pues, el nombre de Jorge una función civilizadora, de abandono del nomadismo por la agricultura y, por tanto, por el control de la tierra y de su ciclo productivo. Y los ciclos significan seguridad, y será Jorge el guardián de esa seguridad frente a los elementos externos que pretendan acabar con ella, ya sean éstos las inclemencias del tiempo, un dragón o el invasor musulmán.



La existencia de San Jorge

Aunque San Jorge tiene una biografía, una leyenda muy difundida e incluso una tumba, su existencia no ha podido jamás ser demostrada. La leyenda cuenta que Jorge habría nacido en Capadocia, en el seno una familia cristiana de finales del siglo III. Geroncio, su padre, de origen griego, servía como oficial en el ejército romano. Su madre, Polijromia, era originaria de Palestina, a donde regresó con su hijo tras enviudar. Jorge, siguiendo los pasos de su padre, se unió al ejército al cumplir su mayoría de edad. Allí llegó a formar parte de la guardia personal del emperador Diocleciano (quien reinó entre el 284 y el 305). En 303, Diocleciano autorizó la persecución sistemática de los cristianos por todo el territorio del Imperio. Jorge recibió órdenes de participar en la persecución, pero parece ser que prefirió salir del armario, dar a conocer su condición de cristiano y criticar la decisión del emperador. Éste reaccionó ordenando la tortura del que había sido su fiel guardián, quien la soportó sin emitir ni una sola queja. Jorge fue finalmente decapitado frente a las murallas de Nicomedia, el 23 de abril del año 303. El cuerpo de Jorge fue devuelto a la ciudad en la que vivió con su madre, Lydda (actual Lod, en Israel), para ser enterrado.



San Jorge y el dragón

La iconografía de San Jorge con el dragón es posterior al siglo XI. La leyenda, de nuevo la leyenda, relata la existencia de un dragón que anida junto a la fuente que provee de agua a una ciudad. Los ciudadanos, para conseguir agua, apartaban al dragón de la fuente ofreciéndole cada día una víctima humana, hasta que un día el sacrificio le correspondió a la hija del rey. Es entonces, cuando la princesa estaba a punto de ser devorada por el dragón, cuando aparece Jorge sobre un precioso caballo blanco y, tras una cruenta lucha, consigue matar al dragón y salvar a la princesa. Los ciudadanos, agradecidos, abandonan el paganismo y abrazan la religión cristiana. Esta historia tiene elementos comunes con el antiguo mito griego de la princesa etíope Andrómeda (San Jorge, no lo olvidemos, es también patrón de Etiopía) y su salvador y posterior esposo, Perseo, vencedor de la gorgona Medusa. En ambos casos hay un dragón/gorgona con su decapitación, una princesa y una recompensa (el matrimonio, la conversión de una ciudad...) En Capadocia, como una de las primeras regiones en adoptar al santo, puede que haya habido una integración de elementos paganos. Un predecesor de San Jorge en Capadocia puede que haya sido el dios Sabacio, padre celestial de los frigios. Es muy posible que su imagen a caballo arrollando a una serpiente sea el origen de la conocida representación de san Jorge a lomos de un caballo blanco. Por último, como interpretación cristiana del mito, tendríamos que Jorge sería el creyente, el caballo blanco sería la Iglesia y el dragón representaría el paganismo, la idolatría o al mismísimo Satanás.



San Jorge y el Islam

San Jorge fue muy venerado en todo el Oriente Medio. La devoción cristiana se propagó entre la población musulmana, que en muchos lugares lo invoca con el nombre de El-Khódr (El Verde, color de eternidad). Todavía hoy, en lugares de Turquía, Síria y el Líbano, fieles musulmanes se acercan a los templos cristianos donde se venera a San Jorge a pedir favores por la intercesión del santo. Sin embargo, la figura de San Jorge ha generado ciertas fricciones relativamente recientes entre cristianos y musulmanes. No hace mucho, en Alcoi, surgió la polémica sobre si la procesión de la imagen del santo a caballo, asaeteando a dos musulmanes, se adaptaba o no al cristianismo. La imagen, hoy en día, se procesiona con los dos moros que aparecen malheridos bajo el caballo de san Jorge prudentemente cubiertos por vistosos ramos de flores. En Inglaterra se estudia arrebatar a San Jorge el patronozago del país dado que la comunidad islámica no se siente demasiado cómoda con un santo que se convirtió en protector del país tras las Cruzadas. ¿Renunciará Inglaterra a su propia bandera (la cruz de san Jorge) para no ofender a los musulmanes? En ciertos países árabes, la cruz de san Jorge que aparece en el escudo del Barça es convenientemente eliminada antes de poner a la venta las camisetas del equipo catalán. ¿Será la cruz de San Jorge eliminada también del escudo de la ciudad de Barcelona?


¿San Jorge nos une o nos separa? Yo prefiero recurrir a esa función civilizadora de la que hablaba al principio de esta entrada y, cómo no, felicitar a todos los seguidores del blog. Y muy especialmente a los lectores griegos, alcoyanos, catalanes, aragoneses, cacereños...


Feliz día de San Jorge - Feliz día del Libro